Peluquería y Centro de Estética Sergiovico

“Black Box”

 

En la calle Babel, un pasaje peatonal paralelo a la avenida de la Aurora, se acondicionó un local existente para albergar la Peluquería y Centro de Estética “Sergiovico”. Situado en los bajos de un edificio de viviendas de siete plantas, tiene una superficie de 204 m2 y una geometría irregular. De un espacio principal de diez metros de fachada, catorce de profundidad y cuatro de altura emergían diversos espacios no coincidentes en planta baja y entreplanta. El local ocupa el ancho de la crujía del edificio y tiene fachada tanto a la calle Encio como a la calle Babel, desde la cual se produce el acceso.

 

El programa se desarrolla en tres bandas paralelas. En la faja este se condensan los espacios de menor dimensión y de carácter principalmente servidor como son los aseos, preparado de tinte y la escalera de acceso a la entreplanta. Sobre esta banda se ubica un despacho, un almacén y la sala de máquinas. En la banda central, desde la que se produce el acceso, se sitúan los espacios de dimensión intermedia como recepción, salas de estética y lavado. En la banda oeste se ubica la zona de espera y corte.

 

Para acondicionar el local al nuevo uso se realiza una operación que transforma la diversidad del programa planteado permitiendo la creación de un único espacio. Un sistema que es capaz de organizar con una operación sencilla, las diversas relaciones entre los distintos usos.

 

Una gran caja negra coloniza el techo agrupando en un único espacio los diferentes ámbitos del local. En contraposición a esta caja negra se dispone un volumen blanco que contiene las salas de estética. Este mueble es el encargado de articular los distintos espacios de la peluquería: acceso, zona de lavado y corte. Circulando alrededor de este volumen central se descubren los distintos ámbitos del local, articulando además, los accesos a la banda de servicio.

 

Se construye un techo que configura un espacio único, homogéneo y cuya oscuridad hace difícil descubrir sus límites. Por debajo de los 2,10 metros de altura los paramentos varían según las necesidades y se configura como luminoso y extrovertido. La caja negra se separa de los paramentos blancos e intensamente iluminados del local haciéndonos creer que este cuerpo está flotando. Del espacio intermedio cuelgan cortinas; de vidrio, textiles y de luz.

 

La trasparencia del local hasta la altura de 2,10 metros y la luz que ilumina el fondo del mismo hacen que todo el local se convierta en un escaparate, generando una continuidad absoluta entre exterior e interior.

 

Materiales atemporales como la piedra, madera, vidrio y acero se mezclan con otros de carácter más contemporáneo como el metacrilato, vinilos y lacados sobre tableros. La fachada está construida con vidrio en grandes dimensiones y aplacados de piedra, enmarcados en bastidores metálicos que se enrasan y tratan, con un mismo carácter.

 

Promotor:
Sergio Vico

Empresa constructora:
Escreyes